Chutney de Nísperos
Llegaron de China por el siglo XVIII. Destaca por su contenido en pectina, un tipo de fibra soluble, esta retiene agua, se hincha en el estómago formando una película que reduce la velocidad gástrica y produce sensación de saciedad, muy útil para personas que siguen dietas de adelgazamiento. A la pectina se le atribuyen efectos benéficos en caso de diarrea, al retener agua. A esto se une la riqueza en taninos del níspero, sustancias con propiedades astringentes y antiinflamatorias. Por otra parte, la pectina aumenta el PH o sea, disminuye la acidez al llegar el ácido bien mezclado y neutralizado con otros alimentos y la propia fibra, por lo que el consumo de nísperos maduros está indicado en caso de trastornos.
El
níspero, dado su elevado contenido en potasio y ácidos orgánicos, es un buen
diurético, aumenta la producción de orina y facilita la eliminación de
arenillas y sedimentos de ácido úrico de los riñones, por lo que está
especialmente indicado en caso de gota, exceso de ácido úrico, cálculos de
ácido úrico, hipertensión. Popularmente se dice, que ayuda a expulsar piedras
de la vejiga si se mezcla con corteza de rábano.
Ingredientes:
En una cacerola
hervir el vinagre (de alcohol o de manzana) con el azúcar (o el edulcorante)y
la sal cuando se hayan disuelto los cristales del azúcar agregar los nísperos descarozados
, la manzana cortada pluma y la cebolla cortada pluma. Dejar cocinar a fuego
suave, el punto es según el gusto del cocinero. Recomiendo no darle color y
conservar en frascos cuando se quiera consumir hacerlo frió o calentar en una sartén
hasta que suba el color.
NOTA
Se puede realizar con damascos, duraznos en reemplazo de los nísperos y la
manzana cambiar por zanahoria o bien incorporar todos estos elementos.
Al momento de
consumir también se pueden incorporar frutas secas o aceitunas.
Sirve como
guarnición de cualquier carne.